Días de estrellas
- ¿Por qué estamos tan lejos de los niños de la Tierra? – preguntó la pequeña estrella.
- Son ellos los que están lejos de nosotros – contestó su madre.
- Pero si no nos acercamos – protestó la estrellita – nunca veremos su sonrisa cuando se van a dormir.
- Los niños sólo sonríen cuando ven a los payasos, nunca cuando ven a las estrellas – le dijo su madre.
La estrella se quedó muda y algo triste.
Después tuvo una idea. Se colocó una nariz de payaso y se acercó hasta un lugar del cielo, desde donde podía ver la ventana de un niño.
Cuando el pequeño se fue meter en la cama se asomó a la ventana, y su cara se iluminó con una gran sonrisa al ver a la estrella con nariz de payaso y la saludó con la mano.
Su madre entró en la habitación para acostarle.
- Mamá ¿por qué estamos tan lejos de las estrellas del cielo – preguntó el niño.
- Son ellas las que están lejos de nosotros – contestó su madre.
- Pero si no nos acercamos – repuso el niño – nunca las veremos con su nariz de payaso.